Se observa al comienzo: 

• Escasas verbalizaciones pese a que con sus padres a veces habla y otras  no; con los demás lo más frecuentes es: "tacataca...", "tequeteque..." o silencio.
• Temeroso, evita mirar a personas que no sean sus padres y hermano.
• No juega, sólo desordena y tira los juguetes.
• Socialmente uraño.
• Sin iniciativa ni participación.

Se recomienda: Nivel III que contiene 50 lecciones de 20 minutos cada una.

Fórmula elegida: intensivo (realiza el método en 5 días seguidos).

Al terminar los efectos son:

• Miguel dice algunas frases cortas.
• Repite palabras recién escuchadas y las utiliza con acierto.
• Demuestra agrado por estar con las demás personas participando activamente de lo que hacen (ha pasado estos días con familiares con los que no tiene especial confianza). Sobre la lección 30 empezó a abrirse y comunicarse cómodamente con estos familiares lo que se fue intensificando según avanzaba el método. Tras llegar a Murcia los padres observaron cómo esta sociabilidad se mantenía y afianzaba con todas las personas de su entorno, mostrándose el niño: amigable, simpático, participativo y con iniciativa.